Las lesiones de la AAC son aproximadamente 12% de aquéllas que suceden en la cintura escapular. Algunas de las veces, estas lesiones son subestimadas y diagnosticadas como esguinces, por lo que su incidencia podría ser más alta. La luxación acromioclavicular (AC) representa 8% de todas las luxaciones en el cuerpo humano. La mayoría de estas lesiones se presentan en hombres, con una relación que va de 5 hasta 8:1 en comparación con las mujeres; la práctica deportiva es la primera causa de lesión.
La AAC, al estar subcutánea y sin gran cantidad de músculos que la protejan, es susceptible de lesión. El mecanismo de lesión más frecuente es un golpe directo en la cara lateral del hombro con el brazo aducido, lo que produce un desplazamiento inferior de la escápula. En un inicio, la fuerza de la lesión afecta a los ligamentos acromioclaviculares y coracoclaviculares. El complejo capsuloligamentario de la AAC es el primero en fallar, y posteriormente, los ligamentos coracoclaviculares.
TRATAMIENTO
El tratamiento de la articulación acromioclavicular sigue en debate debido a que no hay un consenso para el manejo óptimo de las lesiones en esta articulación. Rockwood y Green describieron dos escuelas fundamentales: 1) el tratamiento conservador o no quirúrgico y 2) el tratamiento quirúrgico. Aunque parece simple, es difícil elegir cuál es la mejor entre varias técnicas quirúrgicas para el tratamiento de la luxación AC. El objetivo del tratamiento, quirúrgico o no, es llevar a los pacientes a no tener dolor en el hombro, con rangos de movimiento completos, fuerza normal y sin limitaciones en sus actividades
En el tratamiento no quirúrgico los pacientes tienen excelentes resultados clínicos y sin dolor en la función del hombro, aunque algunos presentan inestabilidad crónica y dolor. La ventaja del tratamiento no quirúrgico es que el regreso al trabajo y a la actividad deportiva es dos veces más rápido comparado con el tratamiento quirúrgico. Hay un acuerdo general que las lesiones tipo I y II de Rockwood deben ser tratadas sin cirugía.
El tratamiento quirúrgico y reconstrucción deben proveer la fuerza suficiente para mantener el intervalo coracoclavicular hasta la curación biológica de los ligamentos y tejidos dañados en la luxación AC. Revisiones actuales han identificado más de 150 técnicas quirúrgicas diferentes para tratar esta lesión. En el tratamiento de la luxación AC se han usado varios métodos de fijación como tornillos, placas, cintillas o ligamentos sintéticos y anclas con suturas. Sin embargo, se han visto complicaciones como ruptura o migración del implante, erosión ósea de la clavícula y luxación recidivante. Por lo anterior, ningún método se ha establecido como estándar de oro para el tratamiento de estas lesiones.